Vive muerto
Vive en el recuerdo de su éxito, paladea sus antiguas victorias y refresca su mente mientras se transporta. Vive perdido como vulgar ropa vieja dentro del armario que fueron un día sus letras. Vive aletargado entre paredes de loza culpando a la edad, humanidad e inspiración de su fracaso estacional, retirando las suplicas cercanas a un lado del asfalto, para intentar no darse cuenta del porqué de su infinito freno emocional y con la fe ciega del abandono de perdidas musas. Vive encogido e inmovilizado por el miedo, calumniando ferozmente a los sentimientos que por sus venas corren despistados, sin acceso al exterior, impedidos y mutilados, asesinados y encarcelados después de una infancia de total libertad. Vive abstemio del placer y borracho del suplicio. Vive loco y enajenado, oculto y fragmentado, para no percatarse de que no vive ya en este mundo, puesto que todo lo dejó en sus líneas, textos y virtuosos libros. Vive muerto y sepultado entre el reclamo de su publico enamorado, muerto en vida por reprimirse y prohibirse volver a sacar la pluma del arquilla, ésa que tanto y tanto le grita, que por favor le de vida.
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Estoy que no paro, y no he tenido tiempo de nada, pero a ver si esta noche me paso por vuestras casitas ;D
Espero que os haya gustado este microrrelato, un besazo para todos.
8 comentarios:
Muy bueno. A veces, reponerse de un gran éxito debe ser dificilísimo. Y vivir es moverse, no estar enjaulado en lo que eres...o lo que eras.
Un abrazo :)
O lo que eras...Como dice Explorador. Me ha chiflado el texto, estate todo lo ocupadísima - liadísima - estresada que quieras si nos vas mandado cosas así. El pasado, el éxito de otros tiempos como prisión. No solo de los artistas, también de los deportistas. Ahí hay un filón de tristezas. Irene, y hasta casi parece que conozcas muy bien a tu protagonista. Cojonudo.
Suerte que no he tenido ningún éxito...
Besos.
Si ese es el destino que se esconde tras el éxito literario, prefiero entonces no tenerlo, jejejeje.... sublime, como todo lo tuyo...
uy aveces nos sentimos así mas muertos que vivos. Me gusto como siempre
La belleza de la hoja que cae al otoño. La decadencia que baila mientras se aproxima al suelo, donde permanecerá hasta que el viento se la lleve al rincón de la muerte.
Hola Talento..vive o al menos eso cree que vive...pero uno no puede vivir sin vivir en ti..en uno mismo...
Gracias guapa, buen día, besos vivientes..
Ehhh, sí, me gusta.
Y tú, descansa, ¿qué es eso que no paras? jaja.
Un beso.
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